jueves, 29 de octubre de 2009



Entre mates y votos.

Con un margen de 17 puntos sobre su mas inmediato perseguidor, el Frente Amplio hizo una muy buena elección y ratificó su condición de primera fuerza política en el país hermano uruguayo.

Sin embargo, José "PEPE" Mújica ira a segunda vuelta el 29 de noviembre contra el candidato del poderoso Partido Nacional (Blanco), Luís Alberto Lacalle, historicamente representativo de las clases mas conservadoras de Uruguay.

El ex-guerrillero de los Tupamaros, reconoció tras la votacion que "Queda un poco mas de lucha" y agregó "todo indicaría que nuestra fuerza política, una vez más, va a tener una expresión importante.No descartamos tener mayoria parlamentaria" haciendo referencia a la expectativa por la futura votación del 29 del mes próximo.

Una de las claves del masivo apoyo hacia el Frente Amplio se basa segun especialistas en la implemetacion de planes de emergencia social, entre los cuales el "Plan Ceibal",que en dos años y medio dotó a los niños de colegios primarios de una computadora.



El favoritismo ante una segunda vuelta le pertenece al Frente Amplio. No es que porque no gane en primera vuelta suceda lo mismo en el ballottage. El analista Gerardo Caetano dijo que no cree que podría darse un escenario similar al de 1999, cuando Tabaré Vázquez perdió ante Jorge Batlle. “Las coyunturas y los candidatos son muy distintos. Además, el Frente Amplio esta vez pasó a segunda vuelta con un porcentaje muy cercano a la mayoría, y con una bancada mayoritaria”.

En relación al plebiscito que derogaría la ley de anmistía uruguaya hacia los delitos de la ultima dictadura militar, la aprobacíon no llegó al 47%. Está más que claro que esta campaña iniciada hace dos años por organismos de Derechos Humanos y la fundacion Hijos de Uruguay quedó opacada por la voragine de la luche entre los partidos. A su vez, declaraciones del candidato a presidente, Luis Alberto Lacalle anunciando que la derogación de esa ley provocaróa la liberación de todos los presos de la dictadura, no creo un clima propicio para la aceptacion del plebiscito.
Segun palabras del propio Mujica: “Quedaron absorbidos por el pleito entre partidos. Creo que también hay una confusión en el marco de las ideas, sobre todo con el voto en el exterior.”

Con respecto al voto de los uruguayos en el exterior solo recibió el 38% de votos a favor. La sensacion de los encuetados acerca de esta cuestión en el día de la votacion volco declaraciones negativas hacia que los habitantes que se fueron del país decidan sobre lo que pasa dentro de este.
Esta mas que claro que pese al triunfo del Frente Amplio, la sociedad hermana del Uruguay expresó mediante su voto su caracter conservador con respecto a estos dos plebiscitos.

Un antecedente de esta situación en el país vecino ocurrio en 1999 cuando el candidato Tabaré Vázquez perdio en segunda vuelta ante el conservador Jorge Batlle.
Consultado sobre esta cuestíon el analista Gerardo Caetano dijo:Las coyunturas y los candidatos son muy distintos. Además, el Frente Amplio esta vez pasó a segunda vuelta con un porcentaje muy cercano a la mayoría, y con una bancada mayoritaria”.

Ante este escenario, el equipo de Mujica mantuvo reuniones y delineó lo que será el puntal de su campaña: apostar al proyecto de país del centroizquierda, la primera fuerza política de Uruguay. En cambio, el equipo de los blancos decidió que la campaña girara en torno de la figura del “presidenciable” Luis Alberto Lacalle, más despegado de su Partido Nacional, dado que ya recibió el apoyo del Partido Colorado.

A pesar de esto,dos dirigentes colorados,Diego Fau, hijo del ex ministro de Defensa Yamandú Fau, y Joaquín Gamarra Batalla, nieto del ex vicepresidente Hugo Batalla dijeron que le darán su voto a José “Pepe” Mujica”, el candidato rival y favorito en Uruguay. El oficialismo dijo que si gana no descarta integrar a la oposición al gabinete.

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